La llama de la fe aún arde, a pesar de los escombros

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Por: Padre Rodolfo Juárez
El Mensaero Católico

Fr. Juarez

El edificio de Davenport se derrumbó frente a la parroquia de San Antonio en Davenport el 28 de mayo y ahora hemos presenciado su demolición. Hemos tenido que adaptarnos a los cambios en nuestra rutina. Afortunadamente, nuestros feligreses han estado viniendo a misa a pesar del limitado espacio del estacionamiento.

Lo importante es la efusión de buena voluntad de los feligreses y de los miembros de la comunidad en general.  Fue providencial que ese domingo de Pentecostés pudiéramos abrir nuestras puertas a algunos de los inquilinos del edificio, hasta que encontraran un refugio temporal. Sé de un feligrés que ha sido desplazado y tendrá que buscar un hogar diferente.

Al mirar los escombros del edificio en Davenport, me acordé de Ucrania y de algunos de los edificios bombardeados, que quedaron en ruinas… También recordé las imágenes de muchas ciudades europeas después de los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial. Recordé, también, el tornado de Iowa City de 2006, cuando encontramos la estatua del Sagrado Corazón de Jesús sin brazos entre los escombros de la parroquia de San Patricio y de la vela de la vigilia cerca del tabernáculo aún encendida, después de que pasó el tornado. Y ahora, en el 2023, hemos estado ayudando a las personas que han sido desplazadas y continuamos con el buen trabajo de la Ventana de Mc Anthony y nuestra despensa de alimentos y ropa. Es una prueba para mí, que cuando la desgracia

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golpea, tú y yo debemos ser los brazos y las manos de Jesús para tender la mano y ayudar a los necesitados. Y al igual que la vela del santuario que siguió ardiendo entre los escombros de la

parroquia de San Patricio durante y después del tornado de la ciudad de Iowa del 2006, ahora en el 2023, en el centro de Davenport, usted y yo debemos mantener viva la llama de la fe en nuestros corazones por el bien que hacemos por los necesitados.

El 16 de junio de 2023 celebramos la Fiesta del Sagrado Corazón de Jesús. Que sea verdad para nosotros las palabras de la letanía al Sagrado Corazón de Jesús: “Jesús manso y humilde de Corazón, haz que nuestros corazones sean semejantes al tuyo”. ¡Dios con nosotros!

(El Padre Juarez es pastor de la parroquia de San Antonio en Davenport.)


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