Por Barb Arland-Fye
El Mensajero Católico
El padre Jacob “Jay” Livecchi no sabía que el sacerdote que eligió para revestirlo para su ordenación sacerdotal el 22 de junio en la Diócesis de Toledo, sería ordenado obispo tres meses después para la Diócesis de Davenport.
Se enteró por primera vez del nombramiento episcopal del obispo electo Dennis Walsh el día en que el Vaticano lo anunció en Roma, el 25 de junio. Sus amigos comenzaron a enviarle mensajes de texto al padre Livecchi, pre-guntándole: “¿No es ese el padre que te invistió? ¡Va a ser obispo!”. El Vaticano quería hacer el anuncio una semana antes, pero el futuro obispo no quería que su nombramiento eclipsara las ordenaciones de los dos nuevos sacerdotes de la diócesis.
El padre Livecchi recordó la impactante noticia durante una entrevista el 15 de agosto con El Mensajero Católico. El obispo electo Walsh fue el mentor del padre Livecchi durante su año pastoral en las tres parroquias que el futuro obispo dirigió en el noroeste de Ohio: San Juan Evangelista en Delphos, San Juan Bautista en Landeck y San Patricio en Spencerville.
El padre Livecchi describió al obispo electo Walsh como un “mentor realmente bueno” que le brindó a su discípulo un equilibrio entre orientación e independencia y le transmitió un buen sentido del humor. Cuando el padre Livecchi le pidió permiso para dirigir un evento de formación en la fe familiar, su mentor consintió, otor-gándole la responsabilidad total de gestionarlo de principio a fin. “Salió muy bien, pero hubo aprendizaje de por medio”, admitió el padre Livecchi.
La perspicacia financiera y administrativa del obispo electo Walsh fue evidente para el padre Livecchi, quien aprendió a leer las planillas financieras de las parroquias y adquirió conocimientos sobre cómo ser pastor de varias parroquias y también dirigir una escuela preescolar. El obispo electo Walsh le recalcó al padre Livecchi la importancia de tener “una visión a largo plazo, tener un objetivo a largo plazo en mente”.
La humildad de su mentor también impresionó al padre Livecchi. “Nada de lo que hacía era ostentoso”, dijo el joven sacerdote. El obispo electo Walsh le aconsejó que reservara tiempo en su sacerdocio para la oración privada y demostró ese compromiso comenzando su mañana con el Señor.
“La humildad y la o bediencia son dos de los principios que aprendí de él”, dijo el padre Livecchi sobre el obispo electo Walsh, que persiste en la obediencia al Señor incluso en tiempos difíciles, pero que también transmite su alegría por el sacerdocio. “Elegí al padre Dennis (para que me revestiera) porque encarnaba las virtudes de un sacerdote que yo quisiera encarnar en mi propio sacerdocio”, dijo el padre Livecchi. El padre Livecchi agradece el año que pasó con el obispo electo Walsh, que le proporcionó conocimientos para su actual misión temporal en la parroquia Epifanía del Señor en Toledo. Este otoño, el padre Livecchi regresará al Pontificio Colegio Norteamericano en Roma para completar su licenciatura en teología dogmática.
Aparte de los senti-mientos encontrados de tristeza y gratitud por el nombramiento del obispo electo Walsh, el padre Livecchi dijo: “Es un gran sacerdote y un gran amigo. También estoy muy feliz por la Iglesia. Será un buen obispo”.
Se mantendrán en contacto, agregó el padre Livecchi, quien bromeó diciendo que se tomará unas vacaciones en Davenport.
Nuevo Obispo Consagrado para Nuestra Diócesis
Queridos Hermanos y Hermanas, el Santo Padre designó a padre Dennis G. Walsh como nuevo obispo de nuestra diócesis. El viernes 26 de septiembre fue ordenado obispo en la Catedral del Sagrado Corazón. Con la presencia del Cardenal Christophe Pierre, quien es el representante (nuncio) del Papa Francisco en los Estados Unidos; el Arzobispo Thomas Zinkula, obispos, sacerdotes, diáconos y con la comunidad en general, se consagró como décimo obispo de nuestra diócesis.
Como lema episcopal él ha elegido el texto bíblico: “En Tus Manos, Señor” (Salmo 31, 5), que es parte de la antífona que se reza cada noche: En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu.
¡Dios siga bendiciendo a nuestra diócesis y en nosotros a toda la Iglesia!