Por: Lindsay Steele
El Mensajero Católico
Podemos ayudar a aliviar la inseguridad de alimentos a nivel local y en el extranjero con el simple hecho de poner monedas sueltas en una pequeña alcancía de cartón.
El 2 de febrero, Loxi Hopkins –voluntaria diocesana de la oficina de Acción Social de la diócesis de Davenport- dijo durante una sesión virtual del programa Almuerzo y Aprendizaje: “Cualquiera puede hacer esto”, indicando que la próxima colecta del Tazón de Arroz de Servicios de Auxilio Católico (CRS-Catholic Relief Services). “Creo que es excelente para los niños en particular, porque les brinda la oportunidad de aprender sobre lo que está sucediendo en otros países y en sus propios vecindarios”.
CRS se dedica a reducir el sufrimiento y brindar asistencia a las personas necesitadas en más de 100 países, independientemente de su raza, religión o nacionalidad, dijo el diácono Joe Welter, cuya tarea diocesana incluye apoyar los esfuerzos locales de CRS. Los católicos pueden ayudar en este esfuerzo durante la Cuaresma, al donar a la colecta anual del Tazón de Arroz de CRS. Cada año, el 75% por ciento de la colecta de Cuaresma, apoya los esfuerzos internacionales de alivio del hambre. El 25% restante beneficia a organizaciones locales que alivian la inseguridad de alimentos.
Para apoyar los esfuerzos de alivio del hambre a nivel local y mundial, los donantes llenan las pequeñas alcancías de cartón del ” Tazón de Arroz ” con efectivo o hacen una donación en línea en https://www.crsricebowl.org/. Los donantes en línea, indican a dónde les gustaría que vaya la parte de su donación local, ingresando su código postal o el nombre de la parroquia.
Mons. Thomas Zinkula dijo a El Mensajero Católico, que “la colecta es una forma de practicar las tres columnas de la Cuaresma: Oración, ayuno y limosna. ‘El Tazón de Arroz’ de CRS, el programa de fe en acción de Cuaresma, nos invita a practicar estos pilares, reflexionando sobre las necesidades de nuestras hermanas y hermanos y respondiendo con amor para apoyarlos”.
“Realmente no hay nada que CRS no haga” para ayudar a las comunidades a superar el hambre y la desnutrición, la pobreza y los impactos del cambio climático, dijo el diácono Welter durante el programa Almuerzo y Aprendizaje. Los esfuerzos mundiales incluyen proyectos de agua limpia, el establecimiento de programas de microcrédito para que los miembros de la comunidad puedan juntar sus ahorros y hacerse préstamos entre ellos, y ayudar a los agricultores a aprender técnicas agrícolas sostenibles. Recientemente, CRS ha estado trabajando para ayudar a las mujeres a ser más autosuficientes, especialmente en países donde tradicionalmente han tenido pocas oportunidades.
El sitio web del Tazón de Arroz, www.crsricebowl.org, contiene recursos para familias, parroquias y escuelas, que necesitan ideas para maximizar las colectas del Tazón de Arroz. El sitio web presenta historias de esperanza, reflexiones, oportunidades de oración y recetas de comidas que no contienen carnes. El diácono Welter está disponible para hablar en los eventos del Tazón de Arroz según lo permita su agenda.
Los hispanohablantes pueden visitar www.crsplatodearroz.org para obtener recursos.
Los participantes del programa Almuerzo y Aprendizaje, dijeron que las comidas de Cuaresma preestablecidas, que incluyen pescado frito y cenas de sopa, pueden ser una gran oportunidad para compartir información del Tazón de Arroz y recolectar donaciones. El Centro de Estudiantes Católicos Newman en Iowa City planea organizar almuerzos del Tazón de Arroz; para recaudar dinero y crear conciencia. La Universidad San Ambrosio en Davenport, espera repartir las alcancías de cartón del Tazón de Arroz en dos próximos eventos del campus.
El diácono Welter dijo que el clero puede ayudar a esta causa, hablando sobre la colecta del Tazón de Arroz en las misas. “Hay tantas lecturas (de Cuaresma), que encajan bien con los temas. La gente se involucra con lo que se predica; eso es algo que escuchamos una y otra vez sobre la liturgia”.
Hace 80 años, los obispos católicos de los Estados Unidos fundaron CRS. El diácono Welter dijo que CRS minimiza sus gastos generales para que el 93% de las donaciones, puedan ir directamente a programas que ayudan a personas y familias vulnerables. “Eso es lo más alto a lo que se pueda llegar”.
El Diácono Welter cerró el programa de Almuerzo y Aprendizaje con una oración: “Bendice a los donantes compasivos, que apoyan el trabajo de CRS, ayudando a cumplir la misión de salvar vidas, restaurar la dignidad humana y proteger la santidad de la vida humana”.