Por Miguel Moreno-Iberico
El Mensajero Católico
Nosotros fuimos niños y gozamos de la presencia de nuestros padres, hermanos y amistades de nuestros barrios, que vieron como nuestra cabeza se alejaba del suelo. Hemos crecido en medio de un pueblo que sufre y que cree. Por nuestra fe, hemos aprendido a convertir las dificultades en pruebas; el dolor en momentos de purificación y la soledad en tiempos para encontrarnos con

nosotros mismos y con Dios. Somos seres especiales, hechos a imagen y semejanza del Creador. No nos sentimos abandonados; por eso, celebramos con el mayor de los entusiasmos la Navidad, como recordatorio de la venida de Nuestro Señor Jesús hace más de dos mil años y con el clamor de lo profundo de nuestro corazón: ¡Maranata! ¡Ven, Señor, no tardes, que te esperamos! Con el mismo entusiasmo de siempre, les desea la oficina del Ministerio Multicultural: ¡Feliz Navidad!
A la misma vez, próximos a la llegada del 2023, les deseamos unos 365 días de bendiciones, alegrías y esperanzas. Si se presentaran dificultades, dolores y soledades, que nuestra fe la siga transformando en pruebas, purificaciones y encuentros y cercanías con el Dios de la Vida, del Principio y del Final. ¡Feliz Año 2023!
(Miguel Moreno-Iberico es director del ministerio multicultural de la Diócesis de Davenport.)