Working to break the cycle of poverty

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Dear Brothers and Sisters in Christ,

Bishop Amos

Many American families are struggling to make ends meet, and the number continues to rise. For over 47 million people in the United States that is a thin line: between eviction and home, between hunger and health, between unemployment and work, between anxiety and stability. This line is the Poverty Line. The Catholic Campaign for Human Development (CCHD) is dedicated to breaking the cycle of poverty by funding community programs that encourage independence.
Our faith calls us to work for an end to the injustices of poverty and to recognize the importance of work to aid our fellow humans. For over 40 years, the CCHD has joined together with poor and low-income people to identify problems, make decisions and find ways to help them create permanent solutions to poverty in their communities.
The Catholic Campaign for Human Development’s efforts are funded almost entirely through an annual parish collection that will take place on Nov. 23-24. We send 75 percent of your donations to the CCHD national office to invest in anti-poverty projects across the country while 25 percent remains in our diocese for local initiatives. Currently, two local initiatives are receiving some national grant funding from CCHD as well as some support from the local funding: Quad Cities Interfaith in Davenport and Center for Worker Justice of Eastern Iowa in Iowa City. To learn more about the work being done by these two groups visit the video section on The Catholic Messenger website www.catholicmessenger.net.
CCHD grants to local and national anti-poverty efforts are screened, awarded and monitored in close partnership with CCHD and the diocese.
For more information about the collection for the Catholic Campaign for Human Development and the groups it funds, visit www.usccb.org/nationalcollections and click on CCHD.
Please join me in solidarity with CCHD to put an end to poverty in our community and nation. Each of us should be grateful for our blessings and show our gratitude by helping to make a real difference in the lives of our fellow human beings. Your support will help to defend human dignity and take poverty off the map.
May God bless you for your generosity.

Trabajando para romper el ciclo de la pobreza

Queridos Hermanos y Hermanas en Cristo:
En estos momentos muchas familias estadounidenses están luchando día a día para poder vivir y el número sigue aumentando. Más de 47 millones de personas en los Estados Unidos, están en la fina línea entre el desalojo y el cobijo, entre el hambre y el bienestar, entre el desempleo y el trabajo, entre la ansiedad y la estabilidad. Ese límite es la línea de la pobreza. La Campaña Católica para el Desarrollo Humano (CCHD, siglas en inglés), a través de la financiación de programas comunitarios promovedores de la autonomía, busca romper con ese círculo de pobreza.
Nuestra fe nos llama a trabajar, para poner fin a la injusticia de la pobreza y a reconocer la importancia del trabajo, con miras a ayudar a nuestros semejantes. Desde hace más de 40 años, la CCHD ha estado al lado de los pobres y de las personas de bajos recursos, identificándose con sus problemas, tomando decisiones y buscando en sus comunidades formas de cimentar soluciones permanentes a la pobreza.
Los esfuerzos de la Campaña Católica para el Desarrollo Humano son financiados casi en su totalidad por los aportes de la Colecta Anual que se organiza en las parroquias. Ésta colecta tendrá lugar el 23 y 24 de noviembre. Nosotros enviamos el 75% de las donaciones a la Oficina Nacional del CCHD para que sean usadas en proyectos de lucha contra la pobreza en todo el país; mientras que el otro 25% se quedan en nuestra diócesis, para costear iniciativas locales. Actualmente en Iowa, hay dos proyectos locales que están recibiendo algún tipo de financiación del monto nacional proveniente de la CCHD, así como cierto apoyo del fondo local del Comité Interreligioso de Quad Cities en Davenport y del Centro Interreligioso de Justicia Laboral del Este de Iowa en la ciudad de Iowa. Para obtener mayor información sobre el trabajo realizado por estos dos grupos, visite la sección vídeo de la página web The Catholic Messenger www.catholicmessenger.net.
Las subvenciones de la CCHD en la lucha contra la pobreza local y nacional se clasifican, se adjudican y se controlan, en estrecha colaboración con la CCHD y la diócesis.
Para obtener mayor información acerca de la colecta de la Campaña Católica para el Desarrollo Humano y de los grupos que financian, visite la página web, www.usccb.org/nationalcollections haciendo clic en CCHD.
Por favor, únanse a mí, en solidaridad con la CCHD, colaborando con nuestra comunidad y nación para poner fin a la pobreza. Cada uno de nosotros debería sentirse agradecido por las bendiciones recibidas y, a la vez, mostrar gratitud por ayudar a hacer una verdadera diferencia en las vidas de nuestros semejantes. Su apoyo nos ayudará a defender la dignidad humana y a erradicar la pobreza del mapa.
¡Que Dios los bendiga por su generosidad!

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Sincerely in Christ,
Sinceramente en Cristo,
Most Rev. Martin Amos
Mons. Martin Amos
Bishop of Davenport
Obispo de Davenport


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