Por Barb Arland-Fye
El Mensajero Católico
El diácono Mike Snyder recuerda haber participado de una reunión de las dos parroquias de Bettendorf, donde se enteró de la proyección numérica de sacerdotes en actividad en el ministerio para la próxima década y “cómo eso podría afectar a nuestras parroquias en Bettendorf”.
En el 2021, la diócesis tenía 98 sacerdotes, 39 de los cuales están jubilados y 33 tienen 60 años o más. Algunos sacerdotes permanecen activos, más allá de la edad de jubilación de 70 años. Sin embargo, el 73% de los sacerdotes diocesanos estarán jubilados o dentro de los 10 años de la edad de jubilación. “Esos números llaman nuestra atención”, dijo el diácono Snyder de la parroquia de Nuestra Señora de Lourdes en Bettendorf, quien copreside la Campaña “Sobre Esta Roca” de la Diócesis de Davenport. “Necesitamos más seminaristas para que podamos obtener más sacerdotes y, educar a un seminarista para el sacerdocio, realmente cuesta dinero”.
La diócesis inició la fase pública de esta Campaña de $28 millones en 16 parroquias el 23 al 24 de abril y continuará el 30 de abril al 1 de mayo. La Campaña solicita estos fondos para cubrir los costos de jubilación y atención médica de los sacerdotes, para los costos de educación de los seminaristas y para las parroquias, que determinarán los proyectos que con ese dinero quieran financiar. Hasta la fecha, la Campaña ha recaudado casi $7 millones (alrededor del 25 %) de la meta en donaciones y promesas, dijo Michael Hoffman, director diocesano de la Oficina de Desarrollo y Administración. Eso incluye casi $1.4 millones de los sacerdotes de la diócesis.
“Estamos llamados a construir una casa, que esté sólidamente asentada sobre cimientos firmes; para que podamos satisfacer las necesidades espirituales de las personas en el sureste de Iowa”, dijo el obispo Thomas Zinkula. “En particular, estamos llamados en este momento crucial a abordar los costos financieros apremiantes; para mantener a nuestros sacerdotes jubilados y ancianos, asegurar fondos estables para formar y educar a los sacerdotes del mañana y abordar las muchas necesidades que enfrentan nuestras parroquias a nivel parroquial.”
Educar a los sacerdotes del mañana
Los costos de educación de los seminaristas totalizan alrededor de $55,000 al año por seminarista, financiados en parte a través de la Colecta Anual Diocesana. Los fondos recaudados en esta Campaña ayudarán a reducir los gastos de la diócesis y sus parroquias. Ocho
seminaristas están discerniendo un llamado al sacerdocio; hasta hace poco, ese número era de alrededor de 11 a 14.
Provisión para sacerdotes jubilados
Los costos de vivienda de los sacerdotes están cubiertos durante su ministerio activo, pero ellos son responsables de esos gastos cuando se jubilan. La situación de cada sacerdote jubilado varía. Viven de una combinación de ahorros personales, Seguro Social y un estipendio mensual de alrededor de $2,000 de la Sociedad de Ayuda de los Sacerdotes. La sociedad, una organización sin fines de lucro –que no pertenece a la diócesis, ha sido fundamental para ayudar a los sacerdotes a cubrir el costo de atención médica y de jubilación.
“A través de la Sociedad de Ayuda a los Sacerdotes, he sido bendecido con un buen seguro de salud todos estos años. Ahora, recibo un estipendio mensual en mi jubilación, que ayuda a complementar mis costos dentales y de medicamentos y Medicare a través de la generosidad de las personas en las parroquias”, dijo el Padre George McDaniel, quien preside el Comité de Sacerdotes de esta Campaña.
“El éxito de esta Campaña significaría que podríamos depender más de los ingresos de la dotación y reducir un poco la cantidad, que se asigna a cada parroquia e institución para apoyar a la Sociedad de Ayuda a los Sacerdotes”, dijo el padre McDaniel.
El padre John Spiegel, quien también está jubilado, dijo que la Campaña responde proactivamente a las crecientes necesidades de la diócesis. A medida que más sacerdotes se jubilen en los próximos 10 años, el fondo de la Sociedad de Ayuda a los Sacerdotes tendrá que crecer, dijo. El costo de educar a los seminaristas para el sacerdocio también seguirá aumentando. “Cualquiera que busque un título de posgrado sabe que esos costos han crecido exponencialmente”.
Fortaleciendo nuestra Iglesia
Roger y Barb Reilly de la parroquia de San Patricio en Iowa City, acordaron servir en el gabinete de la Campaña; porque ven las etapas de esta Campaña como necesarias para “mantener nuestra fe viva y en bienestar”, dijo Roger Reilly. “Apoyar a los seminaristas en su
educación y discernimiento hará que nuestra Iglesia sea más fuerte en el futuro. Hay una necesidad de que más hombres buenos elijan el sacerdocio como su vocación y nuestro apoyo permitirá que más hombres acepten este llamado. Para las necesidades de los sacerdotes ancianos y jubilados que trabajaron tantos años por nosotros, es justo que proporcionemos fondos para apoyarlos en su jubilación. A los sacerdotes no se les pagan horas extras por sus muchas horas de servicio dedicado ni reciben opciones sobre acciones por su trabajo leal y fiel”.
“La tercera parte de la campaña ayudará a las parroquias locales a atender las necesidades parroquiales extraordinarias que no son fáciles de satisfacer a nivel
parroquial. Al contribuir a la campaña, cada parroquia recibirá un 20 % de su dólar, una muy buena inversión en la economía actual”.