Por Padre Rudolph Juarez

Mi gran amigo el Padre Bryan me llamó para decirme que estaba pensando en ir a Michoacán en junio porque está interesado en escribir su tesis doctoral sobre el pueblo purépecha y cómo reaccionó a la evangelización de los primeros misioneros cristianos. Luego me preguntó que si sabía yo dónde estaba Nuevo Parangaricutiro.
“Nuevo Parangaricutiro es el mismo San Juan Nuevo Parangaricutiro que yo conozco, porque le cambiaron el nombre después de la erupción del volcán Paricutin el 20 de febrero de 1943. Inclusive,” le dije: “Ahí en san Juan Nuevo, entré bailando al templo como se debe. Agarrado de las manos de mis excelsas amigas las madres Antonia y Rosalinda entre como Juan por su casa.”
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