Dear Brothers and Sisters in Christ,
On the weekend of Dec. 13-14, parishes in the Diocese of Davenport will take up the annual collection for the Retirement Fund for Religious. This important annual appeal benefits more than 20,500 senior sisters, brothers, and religious order priests who have dedicated their lives in service to the Church.
These faithful servants have long been a source of inspiration and support in our communities. I am personally grateful for the religious who helped shape my own faith journey. Perhaps you, too, have known an elderly sister, brother, or religious order priest whose quiet dedication, prayerful presence, or selfless acts left a lasting impression on your life.
Today, the challenges many of these senior religious and their communities face in meeting their retirement needs are greater than ever. Most received little to no pay for their service, and their communities struggle to cover rising health care expenses and the increasing cost of day-to-day eldercare. The financial burdens continue to grow, and the need is urgent.
Gifts to the Retirement Fund for Religious make a real, tangible difference to these many women and men religious. Contributions directly support their ongoing care today and help ensure that their communities can plan wisely for their future.
I know you are asked to support many worthy causes, and I thank you for the many ways you give. Please consider making a gift to this year’s collection if you are able — and continue to pray for all our elderly religious. They also remember us daily in their prayers.
May God bless you and your loved ones abundantly with peace and health.
Sincerely in Christ,
Most Rev. Dennis G. Walsh
Bishop of Davenport
Apoyando nuestro religiosos jubilados
Queridos Hermanos y Hermanas en Cristo:
El fin de semana del 13 y 14 de diciembre, nuestras parroquias llevarán a cabo la Colecta Nacional para el Fondo de los Religiosos Jubilados. Este importante llamamiento anual beneficia a más de 20,500 hermanas, hermanos y sacerdotes de órdenes religiosas de edad avanzada, que han dedicado sus vidas al servicio de la Iglesia.
Estos fieles servidores han sido durante mucho tiempo una fuente de inspiración y apoyo en nuestras comunidades. Personalmente, estoy agradecido por los religiosos que ayudaron a dar forma a mi propio camino de fe. Quizás usted también haya conocido a una anciana hermana, hermano o sacerdote de orden religiosa cuya tranquila dedicación, presencia de oración o actos desinteresados dejaron una impresión duradera en su vida.
Hoy, los desafíos que enfrentan muchos de estos religiosos mayores y sus comunidades para satisfacer sus necesidades de jubilación son más grandes que nunca. La mayoría recibió poco o ningún salario por su servicio, y sus comunidades luchan por cubrir los crecientes gastos de atención médica y el aumento del costo de la atención diaria a personas mayores. Las cargas financieras continúan creciendo y la necesidad es urgente.
Las donaciones al Fondo de Jubilación para Religiosos hacen una diferencia real y concreta para estos hermanas y hermanos religiosos. Las contribuciones apoyan directamente su atención continua hoy y ayudan a asegurar que sus comunidades puedan planificar sabiamente para su futuro.
Sé que se les pide que apoyen muchas causas dignas, y les agradezco las muchas formas en que dan. Por favor, consideren hacer una donación a la colecta de este año si les es posible, y continúen orando por todos nuestros religiosos ancianos. Ellos también nos recuerdan diariamente en sus oraciones.
¡Que Dios los bendiga a usted y a sus seres queridos abundantemente con paz y salud!
Sinceramente en Cristo,
Rev. Mons. Dennis G. Walsh
Obispo de Davenport







